jueves, agosto 10, 2006

La receta de la felicidad...

Estaba en la cama a punto de conciliar el sueño cuando Marcos llamo por telefono.
-Es importante-dijo él ( para él todas las cosas son importantes)
-Bueno mañana nos encontramos y combinamos.
-No, tiene que ser ahora-insistió- Es urgente!!!
-Marcos-respondí- son las doce de la noche!!
_Raúl, es urgente, U-R-G-E-N-T-E.
_Por el tono que usó imaginé que podia estar en apuros, así que me fuí. Cuando llegué a su casa, Marcos estaba eufórico, con un libro en la mano y un delantal sin abrochar.
_Estaba acomodando los libros en la biblioteca y encontré esto.(me dió el libro que tenia en la mano,era una biografia de Leonardo da Vinci, una edición de cocina española de principios del siglo xx, nada demasiado raro para la biblioteca de Marcos). Mientras yo hojeaba el libro, él seguia cocinando.
-Lo compré hace muchos años y lo leí esta mañana por primera vez-me dijo.
-¿No me habrás hecho venir a esta hora por esto no?( el libro no tenia nada extraordinario)
-Siiiii, no, no por el libro no, sino por esta hoja suelta que estaba entre sus páginas. Me mostró un papel doblado, amarillento, que volvió a guardar en el bolsillo del delantal antes de que yo pueda verlo bien.
- Es una receta-dijo- ¿Una receta? ( yo seguia sin entender y con mucho sueño)- Marcos abrió una botella de vino, sirvió dos copas e invito a sentarme.
- Vos sabias que Leonardo antes de ser pintor, fué aprendiz de cocina?- Algo que habia leído.
-El padrastro-siguió-, que era pastelero, le habia enseñado el oficio de la cocina y , según cuentan, trabajó en varios lugares y hasta tuvo su propio lugar en Florencia con Sandro Botticelli, el pintor.
- Yo miraba a mi amigo y me preguntaba por qué tenia que estar escuchandolo contarme la vida de Leonardo en lugar de estar en mi cama durmiendo. Bostecé y le dije que me tenia que levantar temprano. El siguió con su relato como si nada.
- En 1473, cuando tenia 21 años, lo nombraron jefe de cocina del lugar donde trabajaba. ¿ que hacía de comer?, ese es el asunto.-Marcos se levantó de la mesa y volvió a revoLver la comida, sirvió mas vino y siguió hablando- Según parece, Leonardo habia ideado un método para combinar los alimentos de acuerdo al espíritu de las personas. Para el melancólico una comida para el desdichado de amor otra... -Como sisi fuesen recetas mágicas- dije ( el tema comenzaba a interesarme)- Si algo así, pero él tenía una obsesión. Estaba convencido que podía encontrar una sola receta para todas las almas en pena. La receta de la felicidad, la llamaba.
-¿ Y la encontró? ( el sueño se me habia ido definitivamente).
_ si, pero nunca la escribió, según cuentan, Leonardo se encargó de esconder los ingredientes en los cuadros que pintó, muchos trataron de descifrar el enigma y nada. Nada de nada, hasta ahora y los ojos se le encendieron y una sonrisa le atravesó la cara.
_ La hoja que tenés en el bolsillo... la que estaba suelta en el libro...
_ Es la receta de la felicidad, si!
- ¿Y ahora me vas a decir que lo que estás cocinando en esa olla es la receta de la felicidad?
-Si, y en unos minutos va a estar lista y vamos a poder probarla.
-Por un momento creí que Marcos me estaba haciendo una broma, que se había vuelto loco!!!, Y decime Marcos... ¿ los ingredientes, los tenias todos?
-Me costó conseguir algunas hiervas pero el resto son cosas sencillas, harina, carne, nada raro. Lo único raro es que hay que revolver 7 horas seguidas y hay que agregar los ingredientes en el momento justo, ni antes, ni despues. Es muy estricta la receta con eso.
Marcos tapó la olla y dijo que habia que esperar 7 minutos.
- ¿Y como sabes que ese papel no es un invento?
_ Porque tiene la firma del autor- respondió-mientras hablaba servia en un plato una pasta marrón oscura de aspecto extraño-La escribió un vasco que dedico su vida a estudiar a Leonardo.
-Conosco a Marcos y sabia que él estaba convencido que la receta era verdadera. Tenia tanto entusiasmo con lo que había encontardo, tanto que me trasmitió su creencia y comimos la comida pensada por Leonardo con la certeza de que íbamos a ser definitivamente felices . Era muy sabrosa y coíncidimos en que no se parecía a ningún plato que hayamos probado antes. Disfrutamos de la cena y seguimos conversando mientras esperabamos que algo pasara, no sabíamos, tal vez una luz extraña, una sensación diferente. Fué entonces que imaginamos que era la felicidad: Volver a ser jóvenes, olvidar las penas, poder amar como un adolecente- Reir, siempre reir, dijo Marcos... Pero nada cambió. ël y yo, éramos los mismos, ni mas felices ni mas tristes que antes que comer el plato pensado por Leonardo. Éramos los mismos hombres de 60 años que se conocian de toda la vida y que una vez más, como tantas otras veces, habian cenado juntos. Cuando terminamos el vino, regresé a mi casa. Sin darme cuenta, me llevé la receta de Leonardo, y pensé mientras la leía que Marcos estaba convencido de que nuestras vidas iban a ser diferentes después de esa noche. Una nota escrita sobre el final de la hoja escrita toda en máyuscula decía: ADVERTENCIA: ESTA RECETA SOLO TIENE EFECTO SI ES INGERIDA POR UNA SOLA PERSONA.
Me pregunté porque Marcos no hizo la comida para él solo, por qué me habia llamado. Entonces comprendí lo que me dijo al oido justo antes de irme.
-Viste Raúl, Leonardo estaba equivocado. La felicidad, nunca es de a uno.

18 comentarios:

Anónimo dijo...

Que lindo esto que escribiste y tiene mucha razon marcos en que la felicidad nunca es de a uno, siempre es de a dos.
Te mando muchos besos y un placer leerte!!!

Anónimo dijo...

La felicidad se basa entre tantas cosas el poder compartir junto a la gente que aprecias y reir un buen rato con ellos, la receta para mi solo fue la excusa para compartir una velada con un entrañable amigo...
Se pueden imaginar 40 años siendo amigo de alguien, las historias que se cuentan de tras adelante de adelante atras, debe ser diviertidisimo :D

Anónimo dijo...

La verdad es que me pareció re tierna la historia, porque en ningun momento me esperaba ese final... y si la felicidad siempre es de a dos, somos seres pares y siempre tenemos la necesidad del otro, es como un vacio si estamos solos.
estuvo buena Andre.
besos.
me gustan tus escritos, me hacen reir, pensar, querer.

Anónimo dijo...

Que linda historia!
gracias por escribir tan lindo.

Andrea Podesta dijo...

Hey contenta de que les hay gustado la historia a mis amigos bloggeros y a los no, queria compartirla porque para mi fué como una caricia en el alma!!!,
besos y pasen de nuevo eh!!

@Intimä dijo...

La felicidad es un camino con dos paseantes...
besitos bonito relato.

Bob dijo...

Muy buena historia!!!, jajaja, Da Vinci ahora da para todo, codigos en la cocina, jajjaja, muy buena historia, me gusto mucho

Sobre tu posterior anterior, una vez me dijeron la siguiente frase: "el amor es como una cerveza fria, si no te la tomas rapido, viene otro y te la quita"

Te parecera curioso perop cuando leia el post de la receta de la felicidad, escuchaba y aun escucho parte de la banda sonora de la pelicula "el codigo davinci", casualidad? (me gusto mas el libro que la pelicula)

Saludos y gracias por la visita

Dr. Bob

Unknown dijo...

Las personas queremos ser felices, creemos que debemos concentrarnos en nosotros mismos, lo cual nos encapsula y nos separa del exterior. Pero esto no nos lleva a ser felices, ni mucho menos, aunque lo creamos asi, nos hace felices las cosas materiales... de que nos sirve tener la ropa mas cara si no tenemos quien nos admire?, en cambio otras personas si nos pueden dar felicidad; compartir con amigos, amar a tu pareja, viajar en familia...
Ademas, para recibir felicidad tambien tenemos que darla.

Andrea Podesta dijo...

Darilea: gracias por tu comentario, amo esa foto que aparece!!!

Bob: viste? Leonardo dá para todo, dentro de poco van a decirnos que en realidad popeye tenia una relacion de amor con brutus o que en realidad heidi golpeaba al abuelo y lo obligaba a tener relaciones con el chivo y que todo esta escondido en el cuadro de la ultima cena, y bue...igual la historia está copada!!!
besos.
Gracias por pasar!!!

Jesu: muy linda tu acotacion!!!

Anónimo dijo...

La FELICIDAD... encierra tantas cosas y no solo es de 1, sino de 2,3,4 y millones de persona... el sentir felicidad esta en ti... en aceptar las cosas tal y como son, buscar el lado bueno de una situación, a veces el solo hecho de ver un niño sonreir te da una felicidad inmensa, el ver una rosa en su maximo explendor te da una felicidad q no sabes como explicar pues no crees la hermosura q ven tus ojos... el saber q alguien a quien quieres esta bien sin importar el lugar donde este, te sientes feliz por ella... y te deseo muchas felicidades y q sigas haciendo feliz a todos los q leen lo q escribes....Desde aqui de VENEZUELA muchisimo exito... Cuidate!

Den-Sahr dijo...

Me encontre con tu blog por casualidad.
La historia esta buenisima, interesante, bonita, magica.

Creo que la felicidad esta en todas partes, solo hay que saber encontrarla...

hay que saber con quien comparirla... porque creo de verdad que esta en todos lados, pero estamos tan ocupados buscando otras cosas que supuestamente nos traeran esta felicidad, que se nos olvida que la llevamos dentro y que esta rodeandonos, buscandonos...

la felicidad esta con quienes amamso y con nosotros mismos... pero a veces no la vemos... o no la valoramos y hay llega la tristeza...

Anónimo dijo...

La verdafd me dejas sin palabras, me gusto tu reflexion, la felicida esta adentro de nosotros, el tema esta en como descubrirla.
Besos

Unknown dijo...

Fíjese Ud. señorita Podesta que esta entrada tiene lo que le faltaba a la reflexión del helado. Así sea en dos presentaciones distintas ambos platos me parecen muy buenos.

Y en cuanto a tu inquietud no creo que sea locura mas bien me parece pura diversión y me encanta que lo disfrute :D

Saludos!

Den-Sahr dijo...

Soy un caballero (como lo dije, con espada, escudo y armadura, que a perdio su honor pero que lo estoy recuperando, al menos quiero hacerlo, por lo tanto, acepto las consecuencias, no les doy la espalda, las enfrento y en eso estoy. La vida no acaba, esta claro, tengo que seguir, en eso estoy... solo esperando su perdon... aunque nunca me lo diga, algun dia lo sabre... gracias por las palabras, el oido, y bue... todo. Saludos desde Chile

E-ditor dijo...

uffff...sobervio...una ecuación perfecta que redacta con la finura de un cirujano la clave de la busqueda de la felcidad..la felcidad en ningun momento es personal, debe ser compartida le ver felices a los demás , atus seres queridos es una necesidad humana , por lo cual queda de manifiesto que una felicidad personl no es mas que egoismo y producto de un ser antisocial+

Saludos

Andrea Podesta dijo...

Hey!!! gracias a todos por escribir!!!
German: Viste?? ya tenes plato principal y postre...ja!!! besitos y aunque no te guste verlo de ese modo, todo arte tiene algo de locura y el tuyo no queda exento! besos

Bocaz: siempre tan sir para escribir, me encantan tus comentarios.

Edu: ya sé que te haces cargo, asi que aca estaré y ya lo sabes, te hago el aguante.
Brujito: siempre es divertido hablar con vos! besos

Zaimar, muy lindo y muy sabio lo que escribiste!!!

Acerina dijo...

Una historia muy bonita :)

Querer compartir la felicidad con los seres que amamos, la familia, los amigos, ya es, en sí mismo, un motivo para ser feliz...

Un abrazo...

foton dijo...

Que maravillosa enseñanza !!!.

Y que lindo lo cuentas. gracias.

Un abrazo.